Hay muchos tipos de miedos y fobias aparentemente irracionales que prevalecen en el mundo. Lo que podría ser motivo de risa para la gente, no lo es para un fóbico. La anatidaefobia es una de esas fobias. Una persona que sufre de esta condición siente que en algún lugar del mundo, un pato o un ganso lo está observando (no atacando o tocando, simplemente observando al individuo).
La palabra Anatidaephobia se deriva de la palabra griega ‘Anatidae’ que significa patos, gansos u otras aves acuáticas, y fobos es la palabra griega que significa temor/miedo.
El miedo a los patos puede ser una condición de ansiedad debilitante, en la que, sin importar lo que uno esté haciendo o en qué parte del mundo se encuentre, sienten la presencia constante de un pato o ganso.
Causas de la Anatidaephobia
La anatidafobia o el miedo a los patos pueden haber surgido debido a un incidente negativo o traumático relacionado con patos o gansos. Se sabe que estas aves tienen tendencias violentas y a menudo se sabe que atacan a las personas sin ninguna provocación. A menudo, bajan en picada para robar comida o simplemente tomar un sorbo.
Un niño puede haber experimentado directa o indirectamente un episodio de este tipo. Es posible que haya experimentado el sonido del aleteo de las grandes alas del ave. Esto hace que se sienta vulnerable o temeroso alrededor de los patos. La mayoría de los casos de fobias infantiles se resuelven con el tiempo. Sin embargo, en pocos casos, persisten hasta la edad adulta.
Síntomas de miedo a los patos
Mientras que la gente normal puede sonreír o reírse ante la idea de estar asustada por un pato, a un Anatidaefóbico, este miedo es persistente y pesa constantemente en la mente. A veces, la fobia es tan extrema que puede incluso afectar el día a día de una persona. Puede que se niegue a abandonar la casa por encontrarse con un pato.
Los síntomas físicos del miedo a los patos incluyen:
- Sudoración
- Temblores o sacudidas
- Boca seca, dificultad para tragar o sensación de ahogo
- Paralizar el miedo que causa que la fobia se mantenga arraigada o congelada.
- Alternativamente, uno intenta gritar o huir.
- Algunos fóbicos temen perder totalmente el control: desmayos, mareos, llanto o vergüenza, etc.
- Dolores en el pecho, malestar gastrointestinal son otros signos de esta fobia.
- Pensamientos de muerte, morir, sentirse atrapado son otros síntomas psicológicos de esta fobia.
Por lo tanto, el miedo a los patos puede tomar el control de la vida de uno completamente, ya que uno se niega a salir de su casa a causa de encontrarse con un pato. Pueden llegar muy lejos para evitar viajar a áreas donde se sabe que hay gansos o patos.
Diagnóstico y superación de la anatidaefobia
En la mayoría de los casos, las personas que sufren de Anatidaephobia se autodiagnostican su condición y son conscientes de que su miedo es irracional. Aún así, son incapaces de controlarlo. Muchos se niegan a acudir a un médico como resultado de lo cual su fobia podría persistir durante años.
Es importante hablar con el médico de atención primaria, particularmente si los síntomas de ansiedad antes mencionados están interfiriendo con su vida diaria. Su médico puede entonces recomendar a un profesional de la salud mental o una de las siguientes terapias que se sabe que son altamente efectivas para tratar y superar el miedo a los patos para siempre.
PNL o programación neurolingüística – Esta terapia se basa en el principio de que la mayoría de las fobias son”comportamiento aprendido o programado” del cerebro. La PNL busca reprogramar la mente para eliminar el miedo de una vez por todas.
Hipnoterapia – Esta es otra terapia probada y segura que profundiza profundamente en la mente del Anatidaephobic para determinar la causa raíz de la fobia.
Otras terapias de autoayuda – Los terapeutas también animan a los fóbicos a practicar técnicas mente-cuerpo como la meditación, la respiración profunda y la escritura de pensamientos positivos para racionalizar los negativos y superar el miedo a los patos.